El ministro transdenominacional Michael Beckwith habla de cuatro tipos de consciencia espiritual.
Está la consciencia “to me” (que podemos traducir al castellano como consciencia “a mí”), la consciencia “by me” (“por mí”), la consciencia “through me” (“a través de mí”) y la consciencia “as me” (“como yo)”.
Quisiera crear en este texto alguna clase de conexión entre el modelo de Beckwith y el modelo de HALO de los cuatro despertares o iluminaciones: la iluminación inicial, la iluminación ascendente, la iluminación trascendente, y la iluminación final o madura.
Empecemos con la consciencia “a mí”. Como el nombre lo indica en este tipo de consciencia todo se percibe como algo que me ocurre a mí. No solo es una consciencia muy egoica, en ese sentido, es una consciencia que se victimiza constantemente. Este tipo de consciencia, más que una consciencia, es, en mi personal forma de verlo, una inconsciencia. En HALO yo hablo de hecho de una inconsciencia original, y es esta la que nos coloca en una posición victimizada.
Corresponde salir de la mentalidad de víctima, de la mentalidad “a mí”, y sustituirla por la mentalidad “por mí”, de acuerdo a Michael Beckwith, lo cual implica una consciencia de responsabilidad. En HALO eso corresponde a lo que yo llamo despertar o iluminación inicial. Es decir que nos empoderamos y nos agencializamos para elevar nuestra consciencia, a través del amor.
Más allá de la iluminación inicial, está lo que yo llamo la iluminación ascendente, en donde el aspirante espiritual tiene acceso a vastas zonas transpersonales. Si quisiera crear una conexión con el modelo de Beckwith, diría que esas zonas no son generadas “por mí” y por mi esfuerzo, sino más bien fluyen “a través de mí”. La persona sigue presente, pero está en un estado de total apertura y rendición a las energías superiores, que de esa cuenta lo habitan y permean.
El tercer despertar de HALO se llama despertar trascendente. Aquí estamos más allá del “a mí”; del “por mí”; y del “a través de mí”. Esta es la fase del “sin mí”, aunque aclaro que esta expresión no es parte del modelo de Michael Beckwith, es una expresión mía. Quiere decir que aquí la persona desaparece y disuelve en su propia base de claridad.
Es cierto que la persona vuelve a aparecer en el cuarto despertar, llamado en HALO despertar maduro. Quizá podríamos comparar e incluso hacer equivalente este despertar a la consciencia “como yo” de Beckwith, que supone una consciencia de unidad. Percibimos lo divino no aparte de mí, sino como yo mismo. En el lenguaje de HALO este yo Dios es llamado yo fénix.
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